Después del papeleo y programar un viaje a 6 horas de ESERP – Business School Barcelona, llegué a un lugar totalmente desconocido para mí. En medio del este de Alemania (Schmalkalden), me encontré con un pueblo muy acogedor, un pueblo donde posiblemente puedas encontrar más cosas que en una gran ciudad. Nada más llegar me encontré con gente de todos los lados y rincones del mundo, desde Tailandia pasando por España, China, Turquía hasta llegar a Irak.
La vida aquí pasa entre clases, la convivencia en la residencia, amigos, conocidos y experiencias. Cada día puedes crear una nueva.
Todo hay que mencionarlo, aquí no hay metro, ni tampoco esperes cada día un extenso programa de actividades. Los estudios son exigentes y en invierno nieva y llueve. Hasta ahí suena muy gris, pero de cosas para hacer, sitios por visitar, fiestas a lo loco, amistades y bonitos recuerdos, podría llenar toda una historia. Pero, ¿por qué explicarte más? ¡Ven a comprobarlo, y de paso salúdame!
Como anécdota de la foto, decir que para mi sorpresa y estando tan lejos de una gran ciudad uno no espera tantas cosas. Después de un viaje largo e inesperado, poco me quedaba en este pueblo alejado de todo; pero poco a poco, uno se da cuenta que lo que antes era un pueblo alejado, ahora encuentra un lugar lleno de amistades, curiosidades y vivencias. La marcha y las emociones que una gran ciudad ofrece, no están tan lejos después de todo.»
Saludos desde Hochschule Schmalkalden – University of Applied Sciences.
Att. Pablo Netzhammer.
