Antes de finalizar 2020 conocimos en nuestro blog a la ONG Bahadur Social Project. En la entrevista con Nacho Puig sobre la organización que promueve el desarrollo a través de la educación, pudimos descubrir los aspectos más relevantes -enfocados al emprendimiento- de un proyecto en el cual también está inmersa su hermana Alejandra Puig, estudiante del Grado en Publicidad, Marketing y Relaciones Públicas en ESERP Business & School.
Ahora, en este artículo, vamos a conocer la parte más social del proyecto y cómo Alejandra se incorporó al mismo. Actualmente ella está desarrollando la parte de comunicación de la ONG junto con sus compañeros y da apoyo al seguimiento y la fidelización de los socios desde Barcelona. Primeramente, destaca que su hermano “siempre ha tenido un alma sensible y de ayuda a los demás”, pero que se quedó sorprendida cuando tomó la decisión de renunciar a todo (familia, amigos, casa, trabajo) para cruzar el mundo y ayudar a los que más lo necesitan.
La visita a Nepal y la implicación de Alejandra
Decidir formar parte de Bahadur fue algo que Alejandra tuvo claro cuando visitó a su hermano en Nepal: “Allí entendí todo lo que estaba haciendo y pude comprobar por mí misma lo feliz que le hacía esta nueva vida. Fue entonces cuando nos sentamos y hablamos de qué es lo que podía hacer yo por la fundación y hasta qué punto podía implicarme dadas mis circunstancias”.
Combinar los estudios y el trabajo no es tarea sencilla, pero aún así Alejandra se esfuerza por intentar llegar a todo. “Desde que empecé el Grado, he combinado la carrera con varios proyectos. Llevo casi 7 años trabajando en Casa Batlló y hace algo más de un año que he empezado a combinarlo también con mi trabajo en la fundación. Además, este año estoy terminando las asignaturas que me quedaban pendientes en ESERP y estoy cursando un Máster en Marketing Digital”.
Poner en práctica lo aprendido en el Grado
Formar parte de la ONG le permite poner en práctica las cosas aprendidas en el Grado que está finalizando en la escuela. “Me he acordado mucho de muchas asignaturas y en ocasiones he tenido hasta que repasar apuntes, menos mal que los tengo todos bien organizados”.
El equipo de Bahadur Social Project es definido por Alejandra como “multidisciplinar” porque “combina muchos aspectos, desde el derecho hasta el business, pasando por el marketing o los eventos”. Por último, Alejandra afirma que en su opinión “la creación de una ONG es similar a la creación de cualquier empresa, la diferencia es que sus beneficios son sociales”.
Formar a los profesores para que sean los motores del cambio
En cuanto a educación y los proyectos que se desarrollan presencialmente en Nepal, Nacho explica que “la gran diferencia de nuestro proyecto es que más que enseñar a los niños directamente, nos focalizamos en los profesores, ellos son los artífices que darán vida al proyecto cuando nosotros nos marchemos”.
“Al iniciar un proyecto marcamos una fecha de salida. En este caso, son proyectos de cuatro años. Durante este tiempo trabajamos con comunidades y personal local, a través de fundamentos didácticos, pedagógicos, psicológicos y en materia de organización, de manera que una vez se termine el proyecto ellos puedan dar continuidad a las actividades puestas en marcha. Así que, resumiendo, nuestro esfuerzo va dirigido en educar a los profesores, para que ellos sean motores de cambio”, explica Nacho Puig.
Empoderar al personal local para evitar la dependencia
Con el objetivo de evitar la dependencia de las comunidades hacia agentes externos, como en este caso ocurre con Bahadur Social Project, se invierten muchos recursos en empoderar al personal local. No obstante, en educación, el programa ‘A Child Friendly School’ ofrece a los niños y niñas -de entre los 3 y 15 años- desarrollar áreas que no contempla el currículum provisto por el Gobierno de Nepal, tales como autoconocimiento, psicomotricidad o desarrollo creativo.
“De nada sirve tener la mejor escuela si no la llenamos de niños”; y es que en Nepal el trabajo infantil está a la orden del día. Nacho afirma que alrededor del 40% de los niños trabajan para mantener a sus familias, “desde llevar los tomates al río para vender, hasta pasear a las cabras o cortar hierba para darles de comer”. Según explica, resulta imprescindible trabajar con las familias y hacerles comprender el papel tan importante que tiene la educación para el desarrollo de sus hijos, y que en sus manos está ser ese catalizador que impulse el cambio.
Bahadur Social Project no solo realiza proyectos en la escuela, sino que busca algo más global ayudando e integrando a las familias de Nepal en el plan de acción. Para ello, se acercan a las familias y valoran sus necesidades elaborando un plan de desarrollo que vaya acorde a la situación. “En el caso de los Chepang, todo gira alrededor de la agricultura”, confirma.
La capacidad de compartir de los jóvenes nepalíes
En el trato con los jóvenes, Nacho destaca la capacidad que tienen para compartir cuando apenas tienen para comer. Entre los objetivos perseguidos y los valores promovidos están “potenciar el liderazgo, la proactividad y compartir con ellos la igualdad de género, cuando en Nepal todavía hoy la mujer tiene un papel secundario en todos los ámbitos, familiar, social y académico”.
“Nepal solo saldrá adelante si sus habitantes están preparados, tienen la creatividad para visualizar cambios y empuje para impulsarlos. Por eso, todo lo que hacemos, tiene la cultura local como base”, argumenta.
Los proyectos que se desarrollan con las donaciones
Nacho Puig es consciente de las limitaciones de la gente para dejarlo todo e irse a Nepal, pero aún así existen muchas maneras de ayudar. “Nosotros insistimos a todos nuestros socios que si pueden se pasen a vernos, que vean con sus propios ojos lo que ellos están haciendo posible, porque Bahadur, en Nepalí, significa valiente; y creemos que esta vida está hecha para todos aquellos que son suficientemente valientes para creer que pueden cambiar el mundo”, comenta.
Cualquier ayuda es bien recibida, porque la idea es seguir creciendo tanto como sea posible y continuar la labor de apoyo a los que más lo necesitan. A Bahadur Social Project le define la palabra compartir, no solo con los jóvenes nepalíes y sus familias sino también con los socios y amigos que colaboran con la fundación. “Tenemos un trato muy cercano con todos ellos, incluso les pedimos consejo en más de una ocasión. Queremos hacerles sentir parte de este barco, ¡el barco de la educación impulsora de oportunidades!”.
Las donaciones se pueden hacer en www.bahadurproject.com, y cada socio puede decidir qué programa financiar, de manera que se sienta más cómodo con la aportación a realizar. “Nosotros nos encargamos de enviarles fotos e informes para mostrar transparencia con las ayudas recibidas”.
Con estas aportaciones, se trabajan básicamente tres áreas. La educativa, con el programa de formación a profesores y el de Child Friendly School. También se trabaja el área de nutrición, salud e higiene, ofreciendo una comida diaria a los niños y niñas de la escuela (32.000 comidas al año) e impartiendo talleres a comunidades. Y por último, en el área de desarrollo, directamente con las familias Chepang, en actividades generadoras de ingresos, que puedan asegurar la educación de sus hijas e hijos.